El pasado 1 de noviembre fui a Trupán y participé de las actividades propias del Día de Todos los Santos. Históricamente, este día se recuerda a los muertos aunque el calendario marque como Día de los Difuntos el día 2.
Esta fiesta religiosa es propia de la Iglesia Católica y su origen se remonta a la primera época del cristianismo y busca honrar a los mártires en general.
Este día es feriado y es propicio para visitar cementerios y colocar flores a los muertos, considerando, como ya se ha dicho, que el día 2 se conmemora a los difuntos. Las manifestaciones se confunden en torno a los santos y a los muertos.
Los trupaninos acuden al cementerio en los días previos para limpiar la tumba de los deudos. El día primero se instalan numerosos puestos a la entrada del panteón vendiendo distintos tipos de abastos, tales como mote con huesillos, flores, velas, fósforos e incluso se ha visto en el cementerio de Huepil a comerciantes vendiendo plantas y ropa.
El día antes se visitaba la tumba para arreglarla y dejarla limpia para el día primero. Se confeccionan coronas con papel de volantín, o se compran a módico precio, y se llevan al cementerio. Algunas familias sirven comidas que fueron del gusto del difunto. Le conversan y le cantan algunas de sus canciones preferidas.
Antiguamente, algunas familias en Trupán solo iban al cementerio en esta fecha, no por el desgano de visitar tan lúgubre lugar, sino porque no era un lugar que debiera ser frecuentado.
A las 09:30 hrs. se realizó la misa. Se recordó a los muertos y se resaltó la figura de los santos. Finalizada la ceremonia se invitó a los participantes a cooperar para la restauración de la Iglesia Católica San Juan Bautista. Los trupaninos asentados en Santiago pueden canalizar su erogación voluntaria en la cuenta 55660121420, BancoEstado a nombre del Comité Solidario San Juan Bautista.
Luego los fieles se dirigieron a la tumba de sus difuntos a dejarles flores y experesarles sus sentimientos. Un breve paneo refleja que hoy asiste menos gente al cementerio, en comparación con años anteriores donde el cementerio se llenaba y había que hacer fila para llenar los floreritos con agua.
- ¿Que curioso? Si ahora hay más difuntos que antes en el cementerio de Trupán ¿Cómo se explica que concurra menos gente que antes?
- Fácil, la gente que venía es la que ahora descansa en este panteón.