domingo, 30 de septiembre de 2007

Trupaninos Genuinos


EL TÍO JUANUCO
o
LA HISTORIA DEL "CISNE GUACHO”

Pocos trupaninos conocemos su verdadero nombre. Durante años descansa bajo el apelativo de “Tío Juanuco”, pero a él no le importa ya que el cariño de su gente es más importante que cómo fue bautizado.





Juan Alberto Fuentes Figueroa, nació el 28 de diciembre de 1948. Su papá tuvo el segundo hotel de Trupán que acogió a todo afuerino que llegó a trabajar a nuestro pueblo en la segunda mitad del siglo pasado. Profesores, Carabineros y funcionarios de ferrocarriles se hospedaron en este hotel, reconocido por su excelente acogida y recibimiento.


El Tío Juanuco se proclama trupanino de pies a cabeza. Por más que han tratado de llevarlo a vivir a Santiago él no se deja amedrentar. Tanto su hija como su esposa tratan a diario de convencerlo para irse a vivir a la capital, pero dejar de vivir en Trupán no se transa, y no cambia por nada el cariño de su gente ni el amor por su pueblo.

“Toda mi niñez la viví en este pueblo y cuido la herencia de todos los trupaninos”, señala el Tío Juanuco al borde de la emoción.
Al consultarle por el sentimiento que lo une a Trupán nos relata una conmovedora impresión. “En la laguna nadaba una pareja de cisnes. En extrañas circunstancias la hembra desaparece y el cisne macho queda solo. Cuando eso ocurre, el cisne no busca nuevos horizontes sino que queda solo, “guacho”, y no se mueve de ese lugar esperando su otra mitad. Así estoy ahora. Yo soy el Cisne Guacho”.

Tiene la sonrisa marcada en su rostro y su saludo es espontáneo a cualquier trupanino. De ocupación comerciante vive junto al muelle y es personaje típico en toda actividad desarrollada en este paisaje natural. Tal como lo señala mucha gente “Si no está Juanuco no hay laguna” él es parte del inventario colectivo y resulta casi imposible pensar en este paisaje sin su rostro alegre y carismático.

En ‘Trupaninos Todos’ le hacemos un homenaje a este hombre de esfuerzo y sacrificio, quién ha vivido toda su vida en nuestro pueblo y lleva encendido en su corazón el amor a Trupán.


Gracias Tío Juanuco.

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